Seguramente ya sabrás que a partir del 21 de abril, Google pondrá en marcha algunos cambios en su algoritmo para favorecer el posicionamiento web de aquellas páginas que dispongan de un diseño responsive que se adapte al tipo de dispositivo que esté utilizando el usuario. Pero además, en su afán por ofrecer resultados realmente útiles y que proporcionen una experiencia positiva, el gigante de Internet también ha anunciado que pondrá fin al chollo de las doorway pages que muchas empresas venían aplicando para mejorar su posicionamiento SEO de una forma poco ética. Se trata de una de las prácticas más habituales del Black Hat SEO que las webs utilizaban para tomar atajos y ganar visibilidad.

Las doorway pages o páginas de puerta trasera son páginas que generalmente pertenecen al mismo dominio, pero que parecen distintas a ojos del usuario cuando realiza sus búsquedas. Para ello, se realizan pequeñas variaciones, pero que al final llevan siempre al mismo destino, por lo que además de ser un engaño, no le ofrecen nada útil.

Tipos de doorway pages

Con la penalización de las doorway pages Google pretende acabar con las malas praxis llevadas a cabo por páginas pobres en contenido y que no aportan valor al usuario ni dan solución a las consultas que se introducen en el buscador. Con lo cual, esto acaba provocando un gran frustración y que la experiencia durante la búsqueda sea muy negativa. No obstante, no debes confundir las páginas de puerta trasera que conducen siempre al mismo destino con las landing pages que realmente ofrecen información útil de manera directa sin que el usuario sea redireccionado. Para que puedas hacerte una idea, a continuación te explicamos cuáles son los tipos de doorway pages que puedes encontrar.

1. Webs que cuentan con muchas páginas o nombres de dominios de localidades concretas que llevan al usuario hasta la web general.

2. Páginas pensadas para canalizar el tráfico hacia la parte de la web que más interesa.

3. Páginas muy similares que se parecen más a los resultados de búsqueda que una jerarquía claramente definida donde pueda buscarse.

Así pues estos tipos de páginas no aportan información útil al usuario y por eso Google ha comenzado ya a penalizarlas para mejorar la experiencia de navegación del usuario. Y es que, como resulta evidente, el único objetivo de las mismas es hacer trampas y posicionar palabras clave para una tercera web. Por eso, si has llevado a cabo este tipo de prácticas en tu página, más vale que vayas solucionando el problema si no quieres que tu tráfico se vea considerablemente afectado.